
Limpieza y salud siempre van íntimamente relacionadas, así ocurre incluso con tu querido perro. Como cuidador o dueño, tienes que procurar que esté limpio para gozar de una buena calidad de vida.
¿Qué pasa si no puedes bañarlo? ¡No tienes porqué aplazar sus cuidados o higiene! Solo tienes que cambiar el abordaje o la táctica.
Situaciones que hacen imposible o poco recomendable el baño
Sin duda alguna, el baño es la alternativa pro excelencia para la higiene profunda de tu perro. Sin embargo, en ciertas ocasiones no podrás recurrir a él.
¿Por qué? Un panorama básico será: porque tu can es muy pequeño. Así que sería peligroso para su salud. Otro motivo frecuente lo representa que lo bañaste hace poco. Aunque él encontró de lo lindo completar con un baño de lodo.
El baño también se descarta si tu mascota se encuentra en la fase post-operatoria y sigue en recuperación. La higiene tendrá que encontrar otros métodos, más convenientes para el momento.
Ante cualquier circunstancia, conviene saber de qué otras formas mantener limpio a tu can.
¡Apela al champú en seco especial para perros!
Los perros destacan por su fidelidad y cercanía a la humanidad. Por tanto, el mercado debía adaptarse ofreciendo productos para cuidar de este amigo fiel. La amplia gama de productos supera el ámbito estético, para cubrir también su higiene.
Simplifica tu vida con la ayuda de un champú seco ideal para la limpieza de tu perro. Será práctico tener siempre uno en casa, si tu perro ama llenarse de lodo o ensuciarse con cualquier cosa.
¿Cómo aplicar un baño en seco?
- Comienza por cepillar a consciencia el pelo de tu perro.
- En el proceso, deshaz cualquier nudo que encuentres en su manto. Este será un básico para que el baño será una tarea más llevadera.
- Agarra una toalla pequeña de algodón. La humedecerás con agua tibia, luego aplicarás el champú en aerosol encima de ella.
- Ahora, pásala por el cuerpo entero de tu perro. Procura no olvidar ninguna zona, tal cual harías en un típico baño.
- ¿Tu perro acumula suciedad y mugre como si fuera un deporte? Entonces, aplica de nuevo el champú. Podrás hacerlo las veces que sean necesarias, sin excederte.
- Finaliza retomando el cepillo de pelo de tu can. La rutina del cepillado será útil para retirar los sobrantes de champú. Cepilla hasta que el pelaje esté suave y seco.
Utiliza toallas húmedas
Otra ayuda que conviene tener en casa si tienes un perro. Para una limpieza increíble, cepilla tanto antes como después de pasarle la toallita. Como notarás, las toallas húmedas consisten en una salida de paso.
Serán prácticas para limpiar orejas, patas o mugre localizada.
Fabrica desodorante para perros en tu casa
¿Lo bañaste hace poco? ¿Tras un paseo de rutina o un día lluvioso volvió ese olor penetrante? Es una realidad compartida por todos los dueños de canes. Lo identificas porque ese olor supera al aroma natural de tu compañero.
Quizás a tu perro le hace falta un desodorante. Podrás hacerlo en casa sin muchos quebraderos de cabeza. ¿Cómo? Necesitarás una parte de vinagre de manzana por dos partes de agua.
Luego verterás el contenido en un recipiente con pulverizador. Así se te hará sencillo rociarla en el pelaje de tu mascota. ¿Por qué vinagre de manzana? Este vinagre brinda excelentes resultados desodorizando.
Por tanto, el manto de tu can estará fresco y tu nariz relajada.
¿Qué evitar al cuidar la higiene de tu perro?
Los métodos que te comentamos en la parte superior: son complementarios. Pueden aplicarse en situaciones puntuales como:
- Si tu mascota es muy pequeña o tiene poco tiempo de nacida
- Está en recuperación tras alguna cirugía
- Lo bañaste hace poco
¿Qué tienes que recordar? Ante estos 3 escenarios mencionados o cuando el veterinario lo recomiende, puedes cuidar de la higiene de tu perro con:
- Champú en seco para perros
- Toallas húmedas
- Desodorantes caseros
En líneas generales, nada será mejor que un buen baño para tu mascota. Entonces, ¿dónde está la advertencia?
- Abstente de colonias convencionales en un intento de que tu perro se mantenga limpio. ¿Por qué? Es posible que irriten su piel e incluso la dañen.
- Utiliza de forma exclusiva los champuses secos que estén diseñados para animales. De lo contrario, expondría a tu amigo peludo a sufrir una reacción alérgica.
- Descarta el uso de toallitas húmedas comerciales. ¿Por qué? Es posible que contengas sustancias demasiado fuertes para la piel de tu can. El riesgo se agudizará si tu perro padece alergias, dermatitis, sensibilidad o problemas de la piel.
Apenas pueda, recobra la rutina del baño. Claro, ese momento debe unirte con tu perro, siendo un rato de paciencia y afecto. De lo contrario, será un tiempo estresante para cuidador y mascota.